Soy rebeldía, Soy pasión, Soy libertad. Y aún, pese a vivir « Rebelde » en medio de un mundo de falsa moral, que te juzga fácilmente por expresarte, por mostrarte como una mujer «loca», sensible, asocial. Por ser rara, <<poeta>>, bohemia y demás, soy de aquellas que entiende que la única forma de amar y de vivir, es siendo irremediablemente uno mismo. Aquellas que no tenemos temor de ser auténticas, sabemos,( como lo leí cierta vez), que necesitamos un compañero que desee correr con lobos, que desee rituales de amor y que entienda, que somos tan mágicas, que cuando algo o alguien nos toca el corazón, encontramos mil y una formas diferentes
de amar, de seducir, de sacudirles el alma y de sintonizar las energías. Con una «Lunática», como lo somos pocas, no habrá duda alguna, de que querer verdaderamente y en esencia, no es poseer, es deleitarse con la presencia y la imperfección del otro, porque nosotras las rebeldes, sabemos que la magia, el fuego, está en el corazón, y un hombre corriente, ese que quiere poseer, solo apagará la llama.
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