Hoy, mi soledad vuelve a ser mi compañera, se apodera de mí, me acompaña fielmente.
Hoy el dolor quiere hacerme una jugada de nuevo, pero hoy soy diferente.
Ya no estoy dispuesta a sufrir por quien no lo vale.
Ya no derramaré una sola lágrima por quien no le importó lastimarme.
Alguien que no ama lo que eres, quien no te admira, quien no valora el tipo de persona que tiene a su lado, y sobre todo, quien no siente tu dolor como si fuera propio, no te ama.
Y yo no voy a sufrir por quien no me amó...
Hoy, le doy la bienvenida a la soledad, para disfrutar de mi propia compañía.
M. M.
Comentários